Los espacios exteriores necesitan una protección extra respecto al resto de nuestro hogar, ya que se encuentran continuamente expuestos a las condiciones climatológicas. Por tanto, deben contar con elementos lo suficientemente resistentes tanto al sol como a la lluvia y al viento como las telas plásticas. complementos que permiten proteger u ocultar determinadas zonas de una forma sencilla y económica. No obstante, no todos los modelos son aptos para el exterior, por lo que a la hora de adquirir una tela de este tipo debemos asegurarnos de que reúna ciertos requisitos.
¿CÓMO DEBEN SER LAS TELAS PLÁSTICAS?
En primer lugar, han de ser resistentes y duraderas, por lo que es esencial que estén fabricadas con materiales de calidad (por ejemplo, polietileno). Además, es recomendable que dispongan de una protección extra frente a los rayos ultravioleta y que sean impermeables.
La elección del modelo dependerá también del aspecto que se desee otorgar a la terraza o jardín. Afortunadamente, en el mercado existe una amplia variedad estética que abarca desde las variantes más llamativas (en tonos fuertes como rojos, naranjas o amarillos) hasta las más discretas, que se funden a la perfección con el entorno en matices verdes o marrones.
¿QUÉ VENTAJAS OFRECEN?
Principalmente su adaptabilidad ya que pueden ser cortadas a medida para asegurarse de que cubren específicamente la superficie que interesa. Por otro lado, su funcionalidad. Y es que estas telas permiten tanto delimitar espacios así como cubrir, proteger u ocultar otros. De igual forma, la variedad de diseños y tamaños en los que se presentan, permite realizar combinaciones estéticas diversas y para todos los gustos. Y no menos importante es su sencillez. Es decir, se instalan cómoda y rápidamente lo cual evita la necesidad de recurrir a los servicios de un profesional.
¿Cómo las vas a poner tú?
Recomendado por BIG MAT Asurmendi Fuente: teminsa Imagen: Teminsa.